ESCRITOS
HAGA LO QUE HAGA
No me quejo de nada. Siempre recibí más
de lo que merecía mi desempeño exiguo.
Mi anhelo fue cursar un trayecto exitoso,
y el modesto lugar donde llegué, fue por mucho inferior
a mi proyecto sencillo o ambicioso.
Pero a mi desempeño, torpe o hábil a veces,
se lo retribuyó con creces casi siempre.
Recibí mucho más de lo que di.
Tal vez la vida en ocasiones premia intenciones altruistas.
Como desconocemos que razones
propulsan la rueda del Destino,
no siempre es fácil entender que se castiga o recompensa,
por qué padece un justo y un asesino triunfa.
Sólo al envejecer uno comprende
como mucho antes de nacer el camino, posiblemente fue trazado
y el Destino dispuso que, fueran cuales fuesen las acciones,
el resultado no siempre de ellas dependía.
Muchos triunfan. Nadie entiende por qué.
Otros fracasan en asuntos de éxito seguro.
Tanto inocente sufre,
tanto malvado vive apaciblemente.
Es el Azar dicen los sabios.
¿Quién formula el azar?
Cerca ya del final, vengo a entender que viví siempre a oscuras.
El consejo pedante: “La voluntad y el esfuerzo deciden el fracaso o el éxito",
Tal vez sería solo de una abismante ingenuidad.
Y pareciera ser que, haga lo que haga,
desde la eternidad su resultado, escrito estaba ya.
No me quejo de nada. Recibí mucho más de lo que di.